Esta iniciativa permitirá reducir las emisiones de CO2 en un 84% por contenedor, ahorrando alrededor de 9.000 toneladas de CO2 al año.
DB Schenker y Volvo Cars han establecido una asociación para promover un transporte marítimo más sostenible, dentro de la cuál se incluye el envío de 12.000 TEUs de repuestos automotrices en barcos que utilizan biocombustible.
Esta iniciativa permitirá reducir las emisiones de CO2 en un 84% por contenedor, ahorrando alrededor de 9.000 toneladas de CO2 al año en comparación con los barcos de carga marítima que funcionan con combustibles fósiles.
El programa, que comenzó en junio, conecta la planta de producción de Volvo Cars en Gotemburgo con los puertos estadounidenses de Savannah, Newark y Nueva York, y marca el inicio de una relación comercial a largo plazo entre ambas compañías.
En el marco de la operación se ha destacado la importancia de que la industria de la automoción se asocie con proveedores de logística para lograr la descarbonización de la cadena de suministro, mientras que desde Volvo Cars se ha hecho un llamamiento para incentivar a otros fabricantes de automóviles a adoptar medidas para aumentar la demanda de transportes marítimos eficientes en carbono.
DB Schenker ha adquirido en este sentido biocombustible de segunda generación, específicamente éster metílico de aceite de cocina usado. Este está certificado por un tercero independiente y cumple con los estándares de la Directiva de Energías Renovables de la Unión Europea.
Además, se utiliza un método llamado balanceo de masa, que garantiza que si el biocombustible renovable no está disponible para un envío específico de Volvo Cars, se asignará a otro cliente en otro lugar, siempre asegurando una reducción general equivalente de combustibles fósiles en los barcos de carga.
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