El 14º Grupo de Trabajo Intersesional sobre Gases de Efecto Invernadero (ISWG GHG 14) se reunió la semana pasada en la sede de la Organización Marítima Internacional (OMI), un trampolín suelto hacia la 80ª reunión de julio del Comité de Protección del Medio Ambiente Marino (MEPC).
Si bien se debatió mucho, hubo pocas señales de acuerdo general entre los delegados.
Se prestó especial atención a los niveles de ambición, las medidas a medio plazo, la cesta o combinación de medidas que deben finalizarse y la revisión del Sistema de Recopilación de Datos (DCS) de la OMI.
Según la consultora británica UMAS, dos tercios de los que hablaron la semana pasada tenían claro que el transporte marítimo internacional necesitaba alcanzar cero emisiones de GEI para 2050. Para ayudar a estimular la adopción de nuevos combustibles, hubo un amplio apoyo a un objetivo de uso de combustible del 5% para 2030, aunque sin acuerdo sobre el subconjunto de combustibles al que se aplicaría. La mayoría de los países querían que se definiera un objetivo de reducción de GEI para 2040, con una magnitud de reducción de GEI en línea con el objetivo de temperatura de 1,5 grados establecido en el Acuerdo de París de 2015. Casi todos los países que hablaron quieren que estas reducciones estén reguladas por un elemento técnico, como un estándar sobre el combustible, y un elemento económico, como un impuesto al carbono, con estas medidas políticas diseñadas para apoyar la transición.
Guy Platten, secretario general de la Cámara Naviera Internacional, comentó: “Estamos decepcionados por la falta de progreso en el establecimiento de nuevos niveles de ambición para las reducciones de GEI para proporcionar al transporte marítimo un claro objetivo de cero emisiones netas para 2050. Pero seguimos siendo optimistas de que todavía se puede llegar a un acuerdo en la crucial reunión del MEPC en julio”.
“Solo podemos lograr nuestros ambiciosos objetivos si utilizamos todas las herramientas a nuestra disposición. Por lo tanto, me complace que la mayoría de las naciones ahora reconozcan la necesidad de medidas económicas y técnicas en la próxima estrategia de gases de efecto invernadero”, dijo Anne Steffensen, CEO de Danish Shipping.
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