WasteFuel, un desarrollador de biorrefinerías centrado en convertir los residuos sólidos municipales en combustibles bajos en carbono, ha ideado una nueva forma de crear metanol verde.
Entre los muchos inversores en la firma estadounidense se encuentra Maersk, la línea de contenedores que hasta la fecha ha invertido más en buques de caja impulsados por metanol.
El nuevo módulo de metanol WasteFuel está diseñado para producir hasta 100 toneladas métricas por día de metanol de grado combustible a partir de una variedad de fuentes de desechos, incluido el gas de vertedero y el biogás de la digestión anaeróbica.
El proceso está diseñado de manera modular para mejorar la utilización general de los recursos y permitir un escalado rápido y rentable. La tecnología estará disponible para la concesión de licencias.
Cuando se utiliza a escala comercial, WasteFuel afirma que su combustible de metanol verde puede lograr reducciones de hasta el 90% en CO2 y otros gases de efecto invernadero y contaminantes en comparación con los combustibles convencionales.
“El metanol verde es de vital importancia para descarbonizar el transporte marítimo mundial y las cadenas de suministro de las empresas que dependen de él. También hay un vasto mercado de metanol verde en el espacio petroquímico.
El módulo de metanol permitirá a WasteFuel y a las empresas que licencian la tecnología convertir los residuos municipales de manera más eficiente en metanol verde en todo el mundo”, dijo Trevor Neilson, CEO de WasteFuel.
Los esfuerzos existentes de metanol de WasteFuel incluyen una asociación a escala comercial con Maersk, quien se ha comprometido a comprar 30,000 toneladas por año de biometanol de WasteFuel.
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