La energía eólica marina sufrirá varias transformaciones y a diferentes niveles. Estos cambios se refieren a la ambición, la demanda y el tamaño del mástil. Con los objetivos mundiales de descarbonización, se espera que la energía eólica marina crezca exponencialmente en las próximas décadas.
Varios países, sobre todo en Europa, se plantean multiplicar por diez su capacidad de producción. El aumento del número de proyectos en alta mar se observa en todo el mundo, como en Taiwán y el Atlántico Sur.
Por ello, las inversiones en este sector aumentan en número y son cada vez más cuantiosas. Se espera que se inviertan 1.000 millones de dólares en el mercado de la energía eólica marina durante la próxima década.
El mercado de la energía eólica marina presenta muchas oportunidades de futuro. Es un sector atractivo, como muestra la cadena de suministro.
En particular, este último observa un aumento del tamaño de los componentes, un incremento de la demanda y una necesidad de reinversión. Por lo tanto, el mercado de mástiles de turbinas eólicas también debe adaptarse y cambiar.
Adaptación al tamaño de los nuevos componentes
De hecho, el tamaño de los componentes, como las turbinas, está aumentando. Las turbinas más grandes requieren a su vez mástiles más grandes.
Actualmente, las torres de los aerogeneradores tienen un diámetro de 5 a 6 metros. Con el aumento del tamaño de las turbinas, este diámetro aumentará a 9 metros en 2029. Las secciones de la torre también se multiplicarán por cuatro.
El aumento de tamaño de cada componente supondrá a su vez un aumento de peso. Esto se traduce en una torre tres veces más pesada en 2031 que en la actualidad.
En consecuencia, el aumento del tonelaje tendrá repercusiones en la logística de la cadena de suministro. Ya hoy, las instalaciones de fabricación están cada vez más cerca del mar para facilitar el transporte.
Además, se prevé que el peso siga aumentando en el futuro. Esto se debe al movimiento de las olas, que requerirá la construcción de aerogeneradores más robustos y, por tanto, más pesados.
Además de la mayor complejidad logística, las torres más pesadas tendrán un impacto en el mercado del acero. En 2031, las nuevas torres eólicas marinas necesitarán un 500% más de acero que en 2022.
El mercado eólico marino está cambiando
Con la explosión de la demanda, el volumen de pedidos aumentará y multiplicará por 5 el gasto anual en torres. En suma, el gasto total entre 2022 y 2031 alcanzará los 15.000 millones de euros.
Sin embargo, a pesar del aumento de la demanda, se prevé que la oferta disminuya de aquí a 2030. En la actualidad, este suministro es abundante.
Esto último permite a los promotores de energía eólica marina satisfacer una demanda relativamente inestable.
Sin embargo, esto ha tenido un impacto negativo en los proveedores, que han reducido sus márgenes a niveles muy bajos.
Otros factores han tenido un impacto negativo, como la excesiva licitación y el aumento de los costes del acero y la logística.
A partir de 2025, esta situación cambiará. De hecho, la demanda superará claramente a la oferta, lo que provocará un endurecimiento del mercado eólico marino.
Este cambio hará que los proveedores tengan un mayor poder de negociación para obtener contratos. Esto también permitirá a los proveedores aumentar el tamaño de sus márgenes.
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