China está lanzando una investigación antidumping sobre las importaciones de brandy de la Unión Europea, una medida que sigue a la investigación comercial del bloque sobre los vehículos eléctricos chinos.
El Ministerio de Comercio de China que la investigación se produce después de que la asociación de bebidas alcohólicas del país presentara quejas en nombre de una marca nacional.
Una investigación antidumping implica investigar si un país está importando productos a un precio inferior al valor justo de mercado.
Un portavoz de la Comisión Europea confirmó que la investigación se refería a “productos espirituosos (comúnmente conocidos como brandy) derivados de vinos destilados originarios de la Unión Europea”.
“Ahora estamos evaluando la documentación que hemos recibido e intervendremos en el marco de la investigación, según corresponda, en estrecha cooperación con la industria de la UE afectada”, dijo el portavoz de Comercio del ejecutivo de la UE, Olof Gill.
Se espera que el coñac francés sea el principal objetivo de la investigación. El anuncio provocó la caída de las acciones de empresas francesas de bebidas espirituosas como Pernod Ricard SA y Remy Cointreau SA.
Ambas son empresas matrices de marcas populares de coñac, incluidas Hennessy, Remy Martin y Martell.
La medida se considera una respuesta a la investigación antisubsidios de la UE sobre los vehículos eléctricos fabricados en China, anunciada durante el discurso anual sobre el Estado de la Unión de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en octubre.
A la UE le preocupa que las restricciones a las importaciones y los generosos subsidios de Beijing para las empresas con sede en China estén colocando a las empresas europeas en una desventaja injusta, inflando el enorme déficit comercial del bloque con Beijing.
Los vehículos eléctricos chinos baratos han inundado recientemente el mercado de la UE, socavando a los productores nacionales y presentando una amenaza existencial para la industria automovilística europea.
“Los mercados mundiales están ahora inundados de coches eléctricos chinos más baratos. Y su precio se mantiene artificialmente bajo mediante enormes subsidios estatales. Esto está distorsionando nuestro mercado”, dijo von der Leyen en octubre.
“Y así como no aceptamos esta distorsión desde el interior de nuestro mercado, tampoco la aceptamos desde el exterior”.
Francia había sido la voz principal entre los 27 estados miembros de la UE al abogar por la investigación , mientras su principal fabricante de automóviles nacional, Renault, pedía a Europa que actuara en respuesta a la agresiva competencia de China.
La respuesta china se considera modesta, dado que las importaciones de licores de la UE a China representan sólo una pequeña fracción del valor de las exportaciones de vehículos eléctricos de Beijing a la UE.
Pero sí marca un avance simbólico en la actual disputa comercial entre la UE y China.
Los líderes de la Unión Europea reiteraron su advertencia a China de que debería actuar de acuerdo con las normas comerciales durante una cumbre UE-China celebrada en diciembre en Beijing.
La presidenta von der Leyen dijo durante el viaje que la UE “no toleraría que nuestra base industrial (la de la UE) se vea socavada por una competencia desleal”, pero también dijo que ambas partes habían acordado que el comercio entre ellas debería ser equilibrado.
El presidente chino, Xi Jinping, también expresó durante la cumbre que quería que Beijing y Bruselas cooperaran como socios mutuamente beneficiosos.
El gigante asiático es el mayor socio comercial de la UE, con un comercio de bienes que asciende a la asombrosa cifra de 2.300 millones de euros cada día.
Pero las importaciones de la UE procedentes de China superan ahora sus exportaciones en casi 400.000 millones de euros. Este déficit se ha multiplicado por diez en los últimos 20 años y se ha duplicado en los dos últimos años.
Según von der Leyen, “tales desequilibrios son simplemente insostenibles”.
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