La región de Odesa, en el sur de Ucrania, que tiene puertos en el Mar Negro y en el río Danubio, está introduciendo un nuevo mecanismo de control de las exportaciones de cereales, según el gobernador regional Oleh Kiper.
“A partir de ahora, los barcos (barcazas) se cargarán sólo después de un análisis preliminar de la legalidad del origen del grano”, dijo. Todas las declaraciones aduaneras tendrían que registrarse antes de la carga de mercancías de exportación, dijo Kiper, añadiendo que la medida pretende fortalecer la disciplina, la contabilidad y la presentación de informes en la actividad económica extranjera.
Ha habido rumores continuos de que una cantidad significativa de grano proveniente de Ucrania se estaba comprando al contado en virtud de acuerdos que eran opacos, y que esto estaba reduciendo los ingresos del presupuesto estatal ucraniano y, por lo tanto, estaba saboteando el esfuerzo bélico de Ucrania.
Mientras tanto, los agricultores estaban tratando de reducir los costos tanto como fuera posible porque se han visto gravemente afectados por los bajos precios internos causados por las dificultades que enfrentan al intentar exportar granos.
“Durante el período de la ley marcial cada uno de nosotros debe contribuir a la Victoria y nuestra economía necesita apoyo ahora”, dijo Kiper.
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