Alemania recibió la aprobación para implementar un programa de $ 1.1 mil millones para subsidiar la fabricación de hidrógeno verde en el extranjero antes de ser importado y vendido en la Unión Europea.
La Comisión Europea dijo que aprobó el programa ‘H2Global’ de Alemania, que está diseñado para respaldar inversiones en la producción de hidrógeno renovable en países no pertenecientes a la UE para su importación a la UE. El plan tiene como objetivo satisfacer la demanda de la UE de hidrógeno renovable, que se espera que aumente significativamente en los próximos años. Al aprobar la iniciativa, la Comisión Europea concluyó que H2Global está en línea con las reglas de ayudas estatales de la UE porque apoya proyectos que reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
“Este esquema alemán apoyará proyectos que conduzcan a reducciones sustanciales de las emisiones de gases de efecto invernadero en línea con los objetivos ambientales y climáticos de la UE”, dijo Margrethe Vestager, vicepresidenta ejecutiva de la UE a cargo de la política de competencia.
Agregó que el esquema contribuirá a abordar la creciente demanda de hidrógeno renovable al apoyar el desarrollo de las partes del mundo con energías limpias donde actualmente no se explota. “El diseño del esquema permitirá que solo se apoyen los proyectos más rentables, reduciendo los costos para los contribuyentes y minimizando las posibles distorsiones de la competencia”, señaló.
Alemania tiene la intención de apoyar el aumento de proyectos de energía limpia en todo el mundo, apoyando hasta 500 MW de electrolizadores para producir unas 40.000 toneladas de hidrógeno verde por año. La iniciativa de importación de hidrógeno verde espera la entrega física de la primera carga en Alemania para fines de 2024 y se espera que funcione durante 10 años a partir de la adjudicación del primer contrato.
El esquema será administrado e implementado por una entidad de propósito especial llamada Hydrogen Intermediary Network Company, o HINT.CO. Esta organización firmará contratos de compra a largo plazo por el lado de la oferta (producción de hidrógeno verde) y contratos de reventa a corto plazo por el lado de la demanda (uso de hidrógeno verde). Los principales beneficiarios serán los productores de hidrógeno renovable y derivados del hidrógeno, como el amoníaco verde, el metanol verde y el queroseno electrónico de todo el mundo.
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