Tras varios meses sin reportar ningún incidente de consideración en las aguas del golfo de Guinea, el pasado 26 de marzo se produjo un ataque pirata contra un petrolero de productos que navegaba a unas 260 millas de Pointe Noir, en la República del Congo.
Diversas fuentes han informado de que el buque Monjasa Reformer, de 13.702 tpm y abanderado en Liberia, resultó abordado por cinco personas armadas que se acercaron en un esquife. Según las últimas informaciones, la tripulación consiguió llegar a la ciudadela del puente y se encuentra a salvo.
La Oficina Marítima Internacional (International Maritime Bureau, IMB) emitió un informe advirtiendo sobre la desaparición de dicho buque. Según los datos del sistema de identificación automática (AIS), este petrolero emitió una señal por última vez el día anterior al ataque, cuando navegaba cargado hacia alta mar en aguas del Congo.
El Golfo de Guinea ha sido considerado los últimos años como una de las zonas más peligrosas para los buques mercantes y el centro de la piratería mundial.
Sin embargo, gracias a la actuación internacional, desde 2021 la actividad delictiva ha disminuido considerablemente.
Según el último informe anual de IMB, En 2022 se produjeron 19 incidentes de piratería, frente a los 35 de 2021 y los 84 de 2020. Aun así, las autoridades han mantenido sus recomendaciones a los armadores de seguir siendo cautelosos en dicha zona.
ANAVE
